Camino hacia la muestra con Alexa en el bolsillo y le susurro “Alexa, reproduce música”. Suenan las Bistects : “….Cézanne y las frutas (que pesao), Seurat y los puntos (que pesao)… Manet y las flores (que pesao)…”.
La muestra de Francisca Amigo se llama “Bla Blabla” y está curada por Diana Aisenberg.
“Alexa, Bla blabá”. Le ordeno. Alexa me responde “Puedo hablar así sin parar”. Y arranca “Bla Bla bla bla bla blablá bla bla….” Alexa imita el tono del habla, pero no dice nada de nada. Mi IA sigue hablando sola, ya no la escucho, pero la dejo seguir parloteando y entro.
Con el blablablá de fondo veo por primera vez la muestra: Pinturas colgadas, plegadas, estiradas, suspendidas, retorcidas. Sobre la superficie de las telas: manos pintadas. Pintura instalada.
Le digo “Alexa, parece que la pintura no se va a morir nunca”. Alexa me responde “Bla bla bla blablá bla bla”.
La pintura acampa mientras estamos en guerra. Una romería. Y muta: se vuelve idea, se esconde en la materia, se camufla en la instalación. Como cuando la pitonisa de Matrix le pregunta a Neo. “¿Me reconoces? Y Neo le dice “…en parte sí”. “Es así Neo, mantienes unos bits y otros los pierdes, pero aún me gustan los caramelos”. Esa es la pintura viva de Francisca, camuflada en las trincheras de un mundo desquiciado.
Le doy un golpe al bolsillo para que Alexa pare de tanto blablá y vuelven a sonar las Bistecs “…. Griegos, romanos, son todos humanos…”
En la superficie de las telas: manos, manos y más manos. Manos mancha, manos líneas, manos esfumadas, manos santas, mano negra, la mano de Dios…todas.
Son telas sobre el aprendizaje. El puro hacer para mirar mejor. La repetición y la práctica que implica aprender algo: para chequear, para revisar, para mejorar… para incorporar en la memoria. “Alexa…Reproducir <<Daniel´s Training>> de Karate Kid”.
Pienso: Es el regalo más hermoso que un discípulo puede hacerle a su maestro. Si fuera una carta sería algo como “…todo lo que mi ojo ve, ahora florece en la materia. Y florece gracias a tus enseñanzas”. La mano y la mirada se funden y el misterio anida en la acción.
“Alexa, ¿qué significan las manos?” Y empieza a decir como un loro: “La mano es el miembro del cuerpo que con más frecuencia se nombra en la Biblia: 1500 veces….La mano representa el conocimiento y el poder…. ” pero yo escucho: “Bla , blablá…bla blá…”
Las pinturas tienen olor a grafiti de baño y a friso romano. Un abecedario sensual de la historia del mundo: desde Altamira hasta el swipe del celular. Letras mudas: danza de los dedos en el espacio. No más teoría. No — más. Ahora Ma nos. Manos nomás. No más BlaBlá, no de nuevo no, no de nuevo decía.
“Alexa, enseñame a pintar manos” “¡Claro! Pintar es una habilidad que se puede aprender con práctica y dedicación. Te dejo unos pasos básicos: Compra un pincel…Aprende a mezclar los colores….Experimenta diferentes técnicas…” — me dice desde el parlante muy suelta de cuerpo. Redoblo la apuesta “Alexa, enseñame a ser astronauta”. “¡Claro! ¡Ser astronauta requiere educación y experiencia!… mantén buena condición física… postula a programas de astronautas…” y sigue Bla Blabla blabá.
Miro por última vez las telas colgando, las manos suspendidas: el tiempo dedicado en atrapar un gesto. Sí, el tiempo dedicado puede ser una clase de amor, amor correspondido.
“Alexa: reproducir una Playlist sobre manos” Alexa me responde “Reproduciendo Manu chao…. A la bin, a la ban, a la bin-bon-bam, …. A la bin, a la ban, a la bin-bon-bam..….no todo lo que es oro brilla….”
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Sobre Bla Blabla, de Francisca Amigo, curada por Diana Aisenberg, parte del ciclo de muestras de KDA en Microgalería.
La muestra se puede visitar hasta el 31 de Agosto, de Jueves a Sábado de 15 a 19 h en Loyola 514, Villa Crespo CABA.
